domingo, 25 de abril de 2010

El aroma de tu piel


Ese aroma fuerte... ese sudor agrio... concientemente lo detesto, mi mente dice no, una y mil veces no. Mi cuerpo, mi sangre, mi piel, mis hormonas dicen sí, lo quiero todo, quiero esa piel sudada, quiero ese aroma fuerte, quiero a ese macho todo para mí!!!

Cuando tus manos ásperas rozan mi piel, debiera rechazarlas, pero las deseo cada vez más. Son como señales que despiertan mi locura, mi deliro, mi pasión.

Tu sexo, quiero todo tu sexo dentro, desgarrándome, atentando contra mi pudor, mi sensatez.  Quiero ser penetrada hasta la saciedad y mucho más.

Por favor, tómame del cabello, quiero que me trates como a una cualquiera, una prostituta, una perra... Quiero que me violes, beses, muerdas, insultes, penetres y vuelvas a penetrar de todas las maneras que tu sexo hirviente decida.

Todo eso lo tengo, y tengo más, mucho más, sólo que de la persona equivocada...